La cantaora actuó el sábado 9 de mayo a las 22h en L’Auditori de Cornellà

El pasado sábado, 9 de mayo, la actuación de Marina Heredia se convirtió en uno de los platos fuertes del 32ª Festival de Arte Flamenco de Cataluña que acoge estos días Cornellà y que se prolonga a lo largo del mes de mayo. Natural de Granada e hija de Jaime ‘El Parrón’, Marina lleva el arte en sus venas. Comenzó a cantar desde su más tierna infancia, trabajando desde entonces sin descanso. Forma parte de esa generación de cantaores que mantiene en su cante y en su valía el cante añejo, el cante de los cantores antiguos, como Arcángel, Miguel Poveda o Estrella Morente. Las entradas anticipadas ya están a la venta por 13,50€  a través de www.auditoricornella.com o per teléfono a través del 93 474 02 02 y con un precio de 15€ en taquilla el mismo día del espectáculo.

En su nuevo Trabajo, Marina presenta una prospectiva de la relación tempo/tiempo

La actuación de Marina Heredia es uno de los actos estrella de la 32 edición del Festival Flamenco de Catalunya organizado por la Coordinadora de Entidades Flamencas y Andaluzas de Cornellà. En el acto presentará “A mi tiempo”, un trabajo que presenta una prospectiva de la relación tempo/tiempo, a través de una selección de temas que marcaron un tempo en el flamenco.

En “A mi tiempo”, espectáculo de su homónimo disco, Marina abre una puerta a la reflexión en un tiempo en el que la vida avanza a un tempo acelerado, que reclama, con exigencia el ya y ahora. Marca el tempo que nos permite ver el mundo que nos rodea y darnos cuenta de que formamos parte de un todo. “A mi tiempo” es un ejercicio de actualización, que no olvida la tradición, los pilares del cante.

Acompañada en la guitarra por José Quevedo “Bolita”, Miguel Ángel Cortés y Diego del Morao, en  la percusión por Paquito González y por Jara Heredia y Anabel Rivera en las palmas y coros. Como apunta el estudioso Luis López Ruiz, esta cantaora mantiene ecos legendarios en su espléndida voz. Los asistentes al evento comprobarán en directo su temple, su gran apuesta en escena, el compás y la elegancia, fruto de la herencia paterna.